Luis Seoane es uno de los artistas más innovadores y polifacéticos de la generación de Os novos u Os renovadores > . Partiendo de la concepción gráfica de la estampa llegó a crear una figuración esquemática propia, plasmada claramente en su madurez.

Exiliado en Buenos Aires, trabajó en el sector editorial y de las artes gráficas. Desarrolló su producción pictórica influenciado por la eclosión del grabado y la estampa en la Argentina de los años cuarenta y cincuenta del siglo XX.

Su viaje por Europa entre 1951 y 1952 provocó un cambio estilístico influenciado por el cubismo. Seoane comienza a dividir la composición en dos planos estructurales: la síntesis del volumen (utiliza la línea incisiva y ancha) y el uso de colores brillantes de máxima pureza (rojos, verdes, azules y amarillos).

Su iconografía recuerda la de motivos prehistóricos y medievales de Galicia, la imaginería celta, las formas románicas, góticas y las vidrieras. Llama especialmente la atención el tratamiento de la figura femenina, convertida en un icono rotundo, simbólico identificado con Galicia, la tierra de su infancia. Son mujeres campesinas que esperan el retorno de los suyos, o mujeres urbanas y modernas como Mujer con rodete, que aparece sentada con su brazo derecho caído y el izquierdo sobre su regazo. Obra de su etapa de madurez, está realizada en tonos ocre, marrón, añil, gris y azul. Supone la búsqueda de la simplificación formal y compositiva, con independencia de la línea respecto al color.

En esta tela presenta un sentido más orgánico de la línea, dejando la geometrización para las masas de color del fondo, las cuales ayudan a recomponer el sentido de la figura en la traslación de lo geométrico hacia lo orgánico.